¡Si tocan a una, nos tocan a todas!
Cartagena de Indias, marzo 13 de 2018. Hacemos un enérgico llamado a las AUTORIDADES DISTRITALES Y
DEPARTAMENTALES para que investiguen y hallen a los responsables del llamado “Tour
de la violación”[1],
que a través de RCN Radio denunció una trabajadora sexual que fue testigo de
este delito que se comete contra niñas y jóvenes que son llevadas a las afueras
de la ciudad de Cartagena y, posteriormente, son violentadas sexualmente por
grupos de hombres –colombianos y extranjeros- que las triplican en número. Este
hecho horroroso llamado “tour” se trata de un safari patriarcal en el que las
mujeres son convertidas en animales para la cacería. Este hecho fue revelado el
9 de marzo, justo después de conmemorar el Día Internacional de los Derechos de
las Mujeres, poniendo en evidencia que aún no estamos en pleno goce de nuestros
derechos, como lo aspiramos al impulsar la política pública de mujeres en la
ciudad.
RECHAZAMOS que los cuerpos de las mujeres
sean cosificados al punto de volverse parte de la oferta turística de la
ciudad. DENUNCIAMOS Y RECHAZAMOS esta economía ilegal que trafica con nuestros cuerpos
convirtiéndonos en un consumo más, al igual que las murallas, las playas, las
discotecas y los restaurantes. LAS MUJERES NO SOMOS COSAS para ser consumidas
y, definitivamente, la violencia contra nuestros cuerpos no puede hacer parte
de ningún tour. El turismo no puede soportarse en violencias patriarcales,
sexistas y racistas.
RECHAZAMOS la tolerancia social que
culpabiliza a las víctimas, asumiendo que la violencia es una consecuencia
lógica y tolerable del trabajo sexual. En primer lugar, estamos frente a actos
de explotación sexual en tanto que hay niñas involucradas. Por otro lado, la
denunciante de este hecho deja ver que las mujeres desconocían que estaban
siendo drogadas, y que fueron perseguidas, cazadas y violadas por varios
hombres cual si fueran animales.
EXIGIMOS a las Autoridades Distritales y Departamentales que desarrollen seriamente las
respectivas investigaciones, hallen y judicialicen a los responsables, para que
estos hechos no continúen dándose, ni queden en la impunidad. Nosotras NO
ESTAMOS CONFORMES con la respuesta dada hasta el momento por las autoridades,
que sólo enfatiza en que no hay denuncias de ningún tipo; no creemos que este “tour”
sea producto de la fantasía de la denunciante. Las mujeres NOS SENTIMOS INSEGURAS
EN LA CIUDAD, sobre todo porque en la denuncia también se deja ver que algunas
de las víctimas de esta cruel violencia fueron raptadas; lo que quiere decir
que, potencialmente, TODAS NOSOTRAS ESTAMOS EXPUESTAS A ESTA MISMA VIOLENCIA.
De igual forma, RECHAZAMOS ENÉRGICAMENTE
el doble feminicidio cometido contra Luz Dary Jiménez Turizo y su hija María
Camila Quesada Jiménez en el corregimiento de Cascajal (Magangué, Bolívar),
quienes antes de ser asesinadas fueron violadas y torturadas. EXIGIMOS también
investigación y judicialización del responsable. ¡NO A LA IMPUNIDAD!
Las
mujeres TENEMOS DERECHO a habitar la casa y la calle de manera tranquila y
segura, una ciudad y un departamento que no garantiza la seguridad de las
mujeres
NO
AVANZA.
EXIGIMOS
el cumplimiento de las política pública de mujeres a nivel Distrital y Departamental
para que, efectivamente, gocemos de una vida libre de violencias.
Las
mujeres DENUNCIAMOS y EXIGIMOS porque:
SI TOCAN A UNA, NOS TOCAN A TODAS Y SOMOS MUCHAS
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